En una entrevista con el sitio web del Consejo Estratégico de Relaciones Exteriores sobre la celebración de la reunión de dos días en Doha acerca de Afganistán, de parte de las Naciones Unidas y con la presencia de representantes de otros países, Nozar Shafiei dijo: “Dado que Qatar ha jugado tradicionalmente un papel en este sentido, esta reunión se llevó a cabo allí. Las reuniones suelen celebrarse en un lugar que sea acordado entre las partes. De hecho, Qatar es un país adecuado tanto para los talibanes como para otros países”.
Señalando que esta reunión se llevó a cabo bajo la supervisión de las Naciones Unidas, lo que es importante desde este punto de vista, agregó: “Los países que participaron en la reunión de Doha, incluidos China, Estados Unidos, Irán, etc., son de alguna manera relacionados con el tema de los talibanes”.
Según Shafiei, la comunidad internacional se ha enfrentado a una especie de incertidumbre con respecto a los talibanes. Por un lado, las presiones económicas y políticas que se han ejercido sobre los talibanes para que tomen medidas en el campo de la violación de los derechos humanos, la violación de los derechos de las mujeres, la violación de las minorías étnicas y religiosas y la formación de un gobierno inclusivo, no han llegado a ninguna conclusión. Por otro lado, abandonar a los talibanes a su suerte no tendrá consecuencias positivas para la comunidad internacional y la sociedad afgana.
En respuesta a ¿cómo se debe tratar a los talibanes en esta situación?, Shafiei dijo: “La pregunta es si se les debe presionar, si se les debe abandonar a su suerte o si mostrándoles flexibilidad, se puede hacerlos responsables”.
Este profesor universitario dijo que hoy en día en Afganistán, dos grupos están en serio desacuerdo entre sí con respecto al tema de las mujeres y otros temas y explicó: “Un grupo está relacionado con Haibatulá Ajundzadá, quien reside en Kandahar y que tiene muchas opiniones extremas, y el otro grupo incluye a personas como el ministro de Defensa, el ministro del Interior y el viceprimer ministro, que tienen una visión más moderada sobre los asuntos de las mujeres y los derechos humanos”.
Shafiei enfatizó que debido a la presencia de estos dos grupos en Afganistán, Naciones Unidas está tratando de fortalecer el segundo y el más moderado espectro. Por supuesto, cabe señalar que el fortalecimiento de este espectro no debe ir acompañado de un rechazo a los talibanes.
Agregó: “Entonces, parece que la reciente reunión bajo la supervisión de las Naciones Unidas fue una respuesta a la pregunta de ¿cómo se debe tratar a los talibanes? ¿Deben estar bajo presión?, mientras que estas presiones no han dado ningún resultado hasta la fecha, o ¿deben ser abandonados?, ya sabemos que este abandono no tendrá ninguna consecuencia positiva. Por lo tanto, tal vez la ONU esté trabajando en el reconocimiento de los talibanes o cualquier otro mecanismo que conduzca a un mayor compromiso con los talibanes y los aliente a ser flexibles en sus estrictas políticas”.
Este experto en temas de Afganistán dijo: “Parece que la ONU alienta a los talibanes en lugar de castigarlos. Tal y como los estrategas han recomendado sobre los talibanes, de nada sirve atacar a este movimiento o presionarlo política o estratégicamente o incluso abandonarlo. Por tanto la única opción para animar a los talibanes a moderar sus políticas extremistas es su reconocimiento o algún comportamiento similar”.
Shafiei dijo que estas discusiones sobre el reconocimiento de los talibanes tienen que ver con los acontecimientos de los últimos meses, y la reunión de Doha ha sido muy significativa en el contexto de estos eventos.
Enfatizó: “En esta reunión, no se tomó ninguna medida con respecto al reconocimiento de los talibanes, incluso se dijo que los talibanes no van a ser reconocidos, pero el tema de esta reunión que fue ¿cómo interactuar con los talibanes?, es un tipo de reconocimiento, y no una presión. Como se mencionó, aplicar más presión no ha sido una solución hasta el momento”.
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