Turquía pretende desarrollar sus relaciones económicas con los países ricos del sur del golfo Pérsico para reducir los problemas financieros provocados por el aumento de la deuda externa, que ha causado la disminución del valor de la lira y el declive de la posición de este país en el ranking mundial de riesgo de inversión. El creciente interés de los países del Golfo Pérsico por invertir en diversos sectores es muy importante para Turquía, que intenta aumentar sus exportaciones para reducir los problemas económicos.

Para superar la situación actual y evitar la continua caída del valor de la lira en los últimos meses, Turquía está muy interesada en atraer depósitos financieros de los países del Golfo Pérsico a los bancos turcos. Además, sabiendo el aumento de los ingresos petroleros de los países del Golfo Pérsico por el salto de los precios del petróleo y el aumento de los activos de los fondos nacionales, Turquía busca lograr una mayor participación en los mercados de los países de la región. Turquía considera al Golfo Pérsico como uno de los centros de competencia de los poderes globales, y en este sentido, está tratando de aumentar el alcance de su presencia económica y política en esta región. El viaje de Erdoğan a los países del Golfo Pérsico después de las elecciones turcas muestra que el aumento de la cooperación política y económica de Turquía con los países del Golfo Pérsico está en la agenda de la política exterior de este país.

Con la visita de Erdoğan a Arabia Saudí, las relaciones entre Ankara y Riad han entrado en una nueva fase tras un periodo tenso. Las relaciones entre los dos países se tensaron severamente tras el asesinato de Jamal Khashoggi, un periodista saudí, en 2018 en el consulado saudí en Estambul. Al seguir seriamente el caso en ese momento, iniciar una investigación e informar a los medios internacionales sobre los detalles de este asesinato, Turquía enfureció a los gobernantes de Arabia Saudí. Sin embargo, con el cambio de las posiciones de Erdoğan hacia el príncipe heredero de Arabia Saudí, el presidente turco visitó este país en abril de 2022. Bin Salman también realizó una visita oficial a Turquía en junio del año pasado y, en marzo, Arabia Saudí depositó 5 mil millones de dólares en el Banco Central de Turquía.

Turquía y Arabia Saudí, que son miembros del G20, están tratando de desempeñar un papel equilibrado y eficaz en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales. Estos dos países consideran la mejora de las relaciones bilaterales y la comprensión mutua de los temas relevantes en línea con los intereses de los países islámicos y consideran el diálogo entre sus líderes como una señal clara para el fortalecimiento de las relaciones entre los dos países. Tanto Riad como Ankara afirman que como potencias regionales y actores internacionales, son los pilares de la estabilidad y la seguridad en Asia Occidental.

Actualmente, 1140 empresas saudíes están operando en Turquía, y 390 empresas turcas, principalmente activas en el campo de alimentos, cosméticos y contratación, están presentes en Arabia Saudí, y el volumen de exportaciones turcas a Arabia Saudí en los primeros 4 meses de este año ha sido de 781 millones de dólares. El volumen de intercambio entre los dos países aumentó de 4.5 mil millones de dólares en 2017 a 6.1 mil millones de dólares en 2022, y Turquía realizó exportaciones por valor de 1.05 mil millones de dólares a Arabia Saudí el año pasado, lo que fue 250 millones de dólares en 2021; Esto indica un salto en las relaciones económicas en los últimos dos años. Turquía planea aumentar el volumen de comercio con Arabia Saudí a 10 mil millones de dólares en los próximos años.

Durante este viaje que se llevó a cabo con la presencia de 200 empresarios y funcionarios del nuevo gobierno turco, las delegaciones de Turquía y Arabia Saudí firmaron un memorando de entendimiento sobre cooperación en materia de fortalecimiento de la inversión directa entre las partes. Los dos países también firmaron acuerdos en los sectores de energía, defensa, investigación y desarrollo económico. También se firmaron memorandos en el campo de las inversiones directas. La firma de un memorando de entendimiento sobre cooperación en el campo de la comunicación y los medios, así como un memorando de entendimiento en el campo de la energía, fueron otros logros de la visita de Erdoğan a Arabia Saudí.

Antes de viajar a estos tres países del Golfo Pérsico, Erdoğan anunció la promoción de los intercambios comerciales con estos países en los últimos 20 años de 1.6 mil millones de dólares a 22 mil millones de dólares. Turquía también considera la atracción de al menos 25 mil millones de dólares de capital de Arabia Saudí, Catar y Emiratos Árabes Unidos para reducir la crisis económica interna entre los principales objetivos de la visita de Erdoğan a estos países. Las visitas regulares de Erdoğan a los países árabes del Golfo Pérsico probablemente generarán inversiones por valor de más de 50 mil millones de dólares para Turquía.

En línea con los objetivos políticos, Turquía ha decidido cooperar militarmente con los países del sur del Golfo Pérsico, y el acuerdo para la venta de drones Akıncı de la empresa Baykar, un fabricante de los drones Bayraktar, es una muestra de ello. Por supuesto, Turquía había comenzado su presencia militar en el Golfo Pérsico desde la iniciativa de Estambul en 2004 en forma de cooperación de la OTAN con el Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo Pérsico, y la base militar en Catar y la cooperación militar con Kuwait se evalúan en este contexto.

En la reunión que Mohamed bin Zayed Al Nahyan, presidente de Emiratos Árabes Unidos, sostuvo por quinta vez en los últimos dos años con su homólogo turco, las partes enfatizaron su determinación de desarrollar las dimensiones de una asociación económica integral. Es probable que las negociaciones entre Emiratos Árabes Unidos y Turquía aceleren importantes oportunidades de inversión y actividades comerciales entre los dos países, y reactiven el sector privado y alienten a los empresarios. Emiratos Árabes Unidos evalúa la visita de Erdoğan con el objetivo de una mayor asociación y una diplomacia de confianza. El propósito de las negociaciones entre Al Nahyan y Erdoğan es desarrollar las relaciones y la cooperación bilaterales y continuar su desarrollo en varios campos en beneficio de ambos países.

Las relaciones entre Turquía y Catar se han desarrollado en los últimos años en materia política, militar y económica, y Doha y Ankara tienen relaciones sólidas y una asociación estratégica. Catar afirma que la asociación entre este país y Turquía es actualmente una de las asociaciones más exitosas del mundo y ha alcanzado el nivel de asociación estratégica con la fuerte voluntad política de ambas partes.