En una entrevista con el sitio web del Consejo Estratégico de Relaciones Exteriores, Jafar Ghanadbashi dijo: “Después del 7 de octubre, los medios sionistas rápidamente se pusieron manos a la obra y trataron de mostrar todos los hechos y éxitos de Hamás al atacar la estructura de seguridad, inteligencia y militar del régimen israelí de forma al revés, y utilizando los medios de comunicación que tienen en todo el mundo, fingieron que la Operación Tormenta de Al-Aqsa era una operación criminal que provocó la brutal matanza de colonos sionistas; Aunque más tarde se descubrió que estas afirmaciones eran falsas”.
Señalando que desde el principio, las organizaciones internacionales eligieron un enfoque equivocado en la protección de los derechos humanos, Ghanadbashi explicó: “La UNRWA es una de las organizaciones de la ONU, y muchas veces los palestinos se han refugiado en sus escuelas, pero luego han sido atacados y martirizados por el régimen israelí, pero la ONU no ha reaccionado adecuadamente. Esto, mientras que la ONU debería haber adoptado posiciones efectivas con respecto a los centros y escuelas de la UNRWA en Gaza”.
Según este experto, la ONU no hizo suficientes esfuerzos para eliminar las restricciones a la entrega de alimentos y medicinas a Gaza.
Sobre las deficiencias de las organizaciones internacionales dijo: “La deficiencia de las organizaciones internacionales, especialmente los organismos de la ONU, es tan obvia que hoy ha provocado muchas protestas en diferentes países, y muchas elites, medios de comunicación y centros políticos han criticado abiertamente sus ineficacias y día tras día sus críticas se vuelven más duras”.
Ghanadbashi continuó: “Por supuesto, al tomar una posición y comentar sobre los crímenes del régimen sionista, los funcionarios de la ONU, así como los funcionarios de los organismos de la ONU, en algunos casos se han unido al grupo de críticos y opositores de estos crímenes. Sin embargo, estas organizaciones no han tomado ninguna medida práctica para impedir la continuación de estos crímenes. En concreto, a pesar de existir argumentos suficientes para condenar al régimen israelí por cometer genocidio, el Tribunal de La Haya no ha tomado una decisión clara y favorable respecto a la solicitud de Sudáfrica de establecer un alto el fuego”.
Respecto a las razones de estas posturas, Ghanadbashi dijo: “Las razones de tales reacciones por parte de las organizaciones internacionales son muy claras. Quizás la razón principal sea los objetivos y motivaciones de la creación de estas organizaciones. Inicialmente estas organizaciones fueron creadas con el objetivo de proteger los intereses de las potencias mundiales. El ejemplo más claro de esto es el derecho de veto de las potencias en el principal y más importante organismo de la ONU, es decir el Consejo de Seguridad”.
Continuó: “Esto significa que dondequiera que las superpotencias, que son miembros permanentes del Consejo de Seguridad, consideren una decisión de esta organización contraria a sus posiciones e intereses, pueden oponerse”.
Señalando que hay otras razones para la inacción de las organizaciones internacionales, este experto en cuestiones de Asia Occidental subrayó: “Parte de esta inacción se debe a la dependencia de los medios de comunicación de los círculos sionistas y de los ricos sionistas en el mundo. Por esta razón, tienen que distorsionar constantemente las realidades de Gaza y anunciar repetidamente que las acciones del régimen israelí son defensa propia y, como resultado, justificar la matanza de niños y otros crímenes”.
Continuó: “En realidad, como resultado de estas acciones de dichos medios, la ola de propaganda que se ha formado ha cambiado la atmósfera política tanto como sea posible”.
Según Ghanadbashi, otra razón para la continuación de los crímenes del régimen israelí en Gaza ha sido la política anti Hermandad Musulmana de algunos gobiernos árabes que, desde el punto de vista del wahabismo, no soportan ningún éxito de los grupos de la Hermandad Musulmana, y que consideran a Hamás como una de sus ramas. Por eso, intentan ayudar y exonerar al régimen sionista de diversas maneras.
Al final dijo: “En este sentido, su ayuda en la creación de múltiples corredores para entregar combustible y otras necesidades al régimen sionista es una de las señales claras de esta política anti Hermandad Musulmana de algunos gobiernos árabes”.
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