En una entrevista con el sitio web del Consejo Estratégico de Relaciones Exteriores, al explicar las relaciones entre Turquía y el régimen sionista y las tensiones que ambas partes han experimentado en sus relaciones hasta ahora, Zahra Sadat Firouzi recordó que Turquía reconoció al régimen sionista el 28 de marzo de 1949 y dijo: “Tras el accidente del barco Mavi Marmara en mayo de 2010, en junio de 2016 Turquía e Israel firmaron un acuerdo para normalizar las relaciones bilaterales. El 30 de marzo de 2018, estas relaciones volvieron a entrar en un período crítico con los ataques israelíes contra civiles palestinos que participaban en la Gran Marcha del Retorno. El 17 de agosto de 2022 se produjo la total normalización de las relaciones y el mismo año ambas partes designaron a sus embajadores”.

Afirmando que las estadísticas oficiales muestran que los desafíos de las dos partes que surgen de vez en cuando no tienen ningún efecto negativo en sus relaciones comerciales, dijo: “Durante el período del AKP, el volumen de comercio entre Turquía y el régimen sionista ha aumentado exponencialmente. Además, el aumento de las exportaciones turcas al régimen sionista ha sido muy importante en los últimos años, y las relaciones económicas entre Turquía y el régimen sionista han logrado avances significativos en los últimos 20 años. Según la información del sistema de comercio privado del Instituto de Estadística de Turquía, las exportaciones del país al régimen sionista en 2002, cuando el Partido AKP llegó al poder, ascendieron a 861,4 millones de dólares, y sus importaciones desde el régimen sionista fueron de 544,5 millones de dólares. En 2022, las exportaciones aumentaron a 6,74 mil millones de dólares y las importaciones aumentaron a 2,17 mil millones de dólares, y el volumen de comercio llegó de 1,41 mil millones de dólares a 8,91 mil millones de dólares. Así que el volumen de comercio ha aumentado un 532% en los últimos 20 años”.

Recordando que el primer encuentro cara a cara entre Erdoğan y Netanyahu tuvo lugar en septiembre en la Asamblea General de las Naciones Unidas, esta experta en cuestiones turcas continuó: “En ese encuentro, Erdoğan destacó la cooperación entre Turquía y el régimen sionista en muchos campos y dijo que la existencia de nuevos campos de cooperación es una realidad y todos saben que el régimen sionista busca transferir sus recursos a Europa. La ruta más lógica de transferir estos recursos es a través de Turquía. Según Erdoğan, también existen oportunidades de cooperación entre ambas partes en las actividades de perforación”.

Afirmó que entre los años 2000 y 2022, la balanza comercial entre el régimen sionista y Turquía siempre ha estado a favor de Turquía, y señaló: “El hecho de que el volumen de comercio no haya disminuido incluso después de la crisis del barco Mavi Marmara en 2010, demuestra que las relaciones económicas se han mantenido fuertes a pesar de los desafíos políticos. Según los datos del Instituto de Estadística de Turquía, el régimen sionista fue el décimo destino de las exportaciones de productos turcos en 2022, y Alemania, Estados Unidos e Irak encabezan esta lista. También, el régimen sionista ocupaba el puesto 29 en importaciones a Turquía, y la mayoría de las importaciones de Turquía procedían de Rusia, China y Alemania”.

Esta experta en cuestiones turcas continuó: “La parte del régimen sionista en las exportaciones de Turquía en 2002 fue del 2,39%, que aumentó al 2,87% en 2022. Además, la parte de las importaciones disminuyó del 1,06% al 0,63% en el mismo período”.

Firouzi afirmó que el presidente turco ha criticado repetidamente al régimen sionista con duras palabras en el pasado, y dijo: “Aunque Erdoğan en su nuevo enfoque no menciona el nombre de Hamás en sus declaraciones oficiales, sí plantea fuertes críticas sobre el asesinato del pueblo de Gaza. A diferencia de años anteriores, él invitó a ambas partes a reducir la tensión y trata de no estropear algunas relaciones recién establecidas con los países de la región. Este enfoque turco parece más equilibrado que en el pasado, y muchos creen que Erdoğan tiene tales consideraciones debido al inicio de la normalización de las relaciones de Turquía con los países de la región y las expectativas económicas de Turquía de algunos países”.

Afirmando que Erdoğan está tratando de adoptar un enfoque moderado al no entrar en tensión, Firouzi consideró que la continuación de este enfoque en la política exterior de Turquía sería beneficiosa para este país y continuó: “En esta situación, la posibilidad de que Turquía desempeñe el papel de mediador en el conflicto entre el régimen sionista y Hamás no es muy alta. Actualmente, no existe una relación basada en la confianza entre el régimen sionista y Turquía, tampoco entre Erdoğan y Netanyahu. Además, Egipto y Arabia Saudí han establecido relaciones más estrechas con Hamás. Entonces Turquía no es un mediador, más bien puede ser un actor que actúe en apoyo al pueblo palestino”.

Según esta experta en temas turcos, esta vez todo es más complicado para Erdoğan porque Hamás es el actor principal en este conflicto. Es muy difícil actuar como mediador y encontrar una solución política en escenarios donde el gobierno palestino no es el actor principal. De hecho, aunque existen tensiones políticas entre Ankara y Tel Aviv, parece que intereses económicos y de seguridad comunes han hecho que Turquía mantenga sus relaciones bilaterales con el régimen sionista, a pesar de sus posiciones a veces duras. Turquía y el régimen sionista seguirán teniendo una relación compleja basada en ‘ni amigos ni enemigos’. Si bien Turquía es uno de los críticos acérrimos de las políticas del régimen sionista hacia los palestinos, ha mantenido relaciones diplomáticas y económicas con este régimen, y a Erdoğan le importan las relaciones con el régimen sionista”.

Firouzi enfatizó: “El volumen de comercio bilateral entre Turquía y el régimen sionista es significativo y las empresas de ambas partes cooperan entre sí en varios sectores. Sin embargo, tensiones políticas han provocado de vez en cuando el corte de las relaciones diplomáticas bilaterales”.