Actualmente, el Partido Conservador en el Reino Unido se enfrenta a varias crisis que fueron descritas de alguna manera en 2003 por Mark Garnett y Philip Lynch en el libro “The Conservatives in Crisis”. De hecho, los conservadores enfrentan crisis tanto a nivel nacional como internacional, cada una de las cuales les da más incentivos para utilizar políticos más experimentados para las próximas elecciones generales.
A nivel de la política interna británica, la crisis económica provocada por la guerra en Ucrania, así como el surgimiento de corrientes izquierdistas y nacionalistas, se consideran los desafíos más importantes para el Partido Conservador, por lo que en las próximas elecciones, este partido enfrentará más desafíos que nunca. Los resultados de las últimas elecciones en todo el Reino Unido han hecho saltar las alarmas para el Partido Conservador.
En Irlanda del Norte, el partido nacionalista Sinn Féin, por primera vez en su historia pudo convertirse en el partido más grande en el Parlamento, venciendo al Partido Unionista Democrático. En general, estos resultados en Irlanda del Norte son desastrosos para los conservadores porque la tradición política del Úlster en Irlanda del Norte, y el movimiento unionista resultante, son considerados aliados de los conservadores, y la derrota de este bloque en las urnas debilitará el frente de los conservadores – unionistas.
La crisis económica provocada por la guerra en Ucrania es uno de los otros desafíos del Partido Conservador que siempre ha sido aprovechada por otros partidos, incluidos el Partido Laborista, el Partido Nacional Escocés y el Sinn Féin. Esta crisis puede considerarse como uno de los desafíos que amenaza los votos de los conservadores en las próximas elecciones nacionales.
A nivel internacional, el conflicto en Ucrania y Asia Occidental es la preocupación más importante de los conservadores. Para los conservadores, como partido con una ideología de defensa nuclear independiente e interesado en la alianza de la OTAN, la guerra en Ucrania podría ser crucial en las elecciones. Además, el conflicto en Asia Occidental y la guerra del régimen sionista contra Gaza han provocado crecientes protestas en todo el Reino Unido, lo que ha fortalecido movimientos y partidos políticos de izquierda como el Sinn Féin, el Partido Laborista, la campaña “Stop the War”, etc. Estas corrientes se oponen políticamente a los conservadores y, por lo tanto, pueden crear grandes desafíos para el partido gobernante en las próximas elecciones.
Dado que la mayoría de los políticos veteranos del Partido Conservador ahora son considerados inútiles y es posible que en estas crisis, políticos emergentes como Rishi Sunak no puedan liderar bien a los conservadores, según los conservadores, solo David Cameron puede hacer frente a los desafíos que enfrenta el partido.
Parece que el regreso de Cameron a Downing Street y su papel como el ministro de Asuntos Exteriores se hizo con dos objetivos. Primero, la presencia de Cameron y su experiencia pueden desempeñar un papel importante en las dos actuales crisis, es decir la guerra en Ucrania y la guerra del régimen sionista contra Gaza. Segundo, con su presencia en el gabinete, él puede considerarse como un posible sustituto de Rishi Sunak. Se cree que él tiene la posibilidad de liderar a los conservadores en las próximas elecciones.
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