En una entrevista con el sitio web del Consejo Estratégico de Relaciones Exteriores, sobre los informes de los medios de comunicación de que Estados Unidos, Europa y Rusia están preocupados por el fortalecimiento del arsenal nuclear de China y su impacto en la política internacional y su disuasión nuclear, Rahman Ghahremanpour dijo: “Recientemente, el fortalecimiento del arsenal de China y los esfuerzos del país por construir ojivas nucleares avanzadas, misiles balísticos intercontinentales, y bombarderos y submarinos nucleares han preocupado a Estados Unidos, Europa y Rusia. Según la evaluación estadounidense, China tendrá alrededor de mil ojivas nucleares en los próximos diez años, es decir, para 2034, lo que significa que la potencia del arsenal nuclear de este país será igual a la potencia nuclear de Rusia y Estados Unidos. Por tanto, por primera vez después de la Segunda Guerra Mundial y en la historia de la política internacional, seremos testigos del surgimiento de tres superpotencias nucleares”.
Continuó: “Las teorías que se han propuesto hasta ahora sobre la estabilidad nuclear y la disuasión nuclear se basan en la presencia de solo dos superpotencias nucleares iguales, es decir, Estados Unidos y Rusia, y las teorías de juegos también predicen que la estabilidad nuclear estratégica es más posible con dos actores. Por lo tanto, el surgimiento de China como la tercera potencia nuclear planteará serios desafíos a la estabilidad estratégica nuclear en el mundo, los enfoques de la disuasión nuclear, la proliferación nuclear y la competencia nuclear en el Indo-Pacífico y Asia del Sur”.
En cuanto a las razones de la adopción de una nueva estrategia nuclear por parte de China, este experto en temas internacionales abordó dos puntos de vista: “En primer lugar, China se está convirtiendo en una superpotencia económica y, dado que está compitiendo con Estados Unidos para cambiar el orden liberal existente, necesita tener más armas nucleares para convertirse en una potencia a la altura de Estados Unidos, en otras palabras, sin tener en cuenta las armas nucleares, China no puede ser el principal competidor de Estados Unidos en la política mundial; Desde este punto de vista, el esfuerzo de China por ampliar su arsenal nuclear es justificable”.
Ghahremanpour añadió: “El segundo punto de vista cree que las amenazas de Estados Unidos contra China y sus esfuerzos por contenerla a través de sus estrechas relaciones con Australia, Corea del Sur, India y Japón, son la razón principal por la que China intenta cambiar su estrategia. En este punto de vista prevalece el enfoque basado en amenazas, es decir, que China esté amenazada a nivel del sistema internacional y regional, así como en la India y el Pacífico, es la razón principal de la tendencia de este país a expandir su arsenal nuclear, y este segundo enfoque se interpreta como un enfoque sistémico y neorrealista en términos de teorías de las relaciones internacionales”.
En cuanto a la reacción de Estados Unidos ante la decisión de China de ampliar su arsenal nuclear, este experto dijo: “En este sentido, un punto de vista cree que el actual arsenal estadounidense y su actual poder nuclear son competitivos con los de China, y por lo tanto, Washington no necesita expandir su arsenal nuclear y, al modernizar las armas nucleares, actualizar los bombarderos, aumentar la precisión de misiles intercontinentales y prevenir los ciberataques de China puede mantener su superioridad nuclear. Los partidarios de este punto de vista creen que fortalecer el arsenal nuclear no necesariamente obliga a China a cambiar su camino actual y, por el contrario, es un desperdicio de recursos económicos estadounidenses. Otro punto de vista cree que Estados Unidos debería ampliar su arsenal nuclear para contrarrestar el creciente poder nuclear de China y la superioridad nuclear de Rusia. Esta visión, que se basa en la estrategia de ‘superioridad nuclear’, afirma que Estados Unidos no será capaz de crear equilibrio y estabilidad nucleares en un mundo tripolar nuclear como en los últimos años y en la era de la Guerra Fría, y que la probabilidad de que ocurra una guerra en un mundo nuclear tripolar es más. En esta situación, la solución de Estados Unidos es aumentar el poder de sus arsenales nucleares hasta el punto de poder lograr una disuasión nuclear preventiva contra China. Es decir, el arsenal nuclear ampliado de Estados Unidos permitirá a este país organizar inmediatamente una guerra preventiva contra Pekín y Moscú en el caso de que estos dos países decidan iniciar una guerra nuclear”.
Ghahremanpour afirmó: “En el enfoque de disuasión nuclear que se ha utilizado hasta ahora, se dice que un país debe tener la capacidad de realizar un segundo ataque nuclear, lo que significa una destrucción mutua absoluta. Pero en el enfoque de la superioridad nuclear, Estados Unidos debe fortalecer su arsenal en términos numéricos y de poder nuclear para que China y Rusia dejen de lado la idea de cualquier tipo de ataque práctico contra Estados Unidos. Esta es la continuación de la teoría de la guerra preventiva propuesta por los neoconservadores en la administración Bush después del 11 de septiembre, aunque en ese momento esta teoría se refería a las armas convencionales y ahora se trata de armas nucleares”.
Refiriéndose a la complicada situación de Rusia frente a la nueva situación del arsenal nuclear de China, afirmó: “Por un lado, Rusia quiere aprovechar el privilegio de tener armas nucleares del mismo nivel que las de Estados Unidos y, por otro, le preocupa que China se convierta en un nuevo rival nuclear para Moscú y para Estados Unidos. Al mismo tiempo, espera que el aumento del poder nuclear de China conduzca a una disminución de la influencia de Estados Unidos en la política internacional. Así que existe una ambigüedad en la política y la visión de Rusia sobre la cuestión de la ampliación del arsenal nuclear de China; Por un lado Moscú acoge con satisfacción el hecho de que el aumento del poder de China conduzca a un debilitamiento del poder estadounidense, pero por otro lado, le preocupa seriamente quedarse atrás en la competencia con China y Estados Unidos. Por lo tanto, parece que Rusia está tratando de compensar esta debilidad y retraso creando una amplia esfera de influencia en Eurasia para sí misma”.
Al afirmar que la expansión del arsenal de China es un tema preocupante para Europa también, Ghahremanpour dijo: “Europa está seriamente preocupada por esta cuestión; Por un lado, le preocupan las amenazas militares convencionales y no convencionales de Rusia a la seguridad de Europa, especialmente Europa del Este, el mar Negro y el Báltico, y por otro lado, le preocupa que el aumento de la potencia nuclear de China haga que este continente dependa de los Estados Unidos y la OTAN en términos de seguridad, y tenga que avanzar hacia el fortalecimiento del paraguas nuclear estadounidense”.
Al final, este experto en cuestiones internacionales dijo: “El aumento del poder nuclear de China ha intensificado las negociaciones internas en la UE sobre cómo utilizar el poder de disuasión nuclear de Francia y el Reino Unido. Es natural que esta situación favorezca el aumento de la influencia francesa en Europa y la disminución de la influencia alemana en la UE. Por otro lado, puede conducir al fortalecimiento de la posición de Gran Bretaña en el sistema de seguridad europeo, lo que va en detrimento de Francia y Alemania. Por tanto, la ampliación del arsenal nuclear de China intensificará las disputas internas en la UE”.
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